Un recorrido por el Código de Ética Empresarial (Parte 2)

Segunda parte de nuestras reflexiones sobre el Código de Ética Empresarial. Esperamos que el conjunto de estos tres comunicados enviados durante esta semana os ayuden a entender que con nuestro visto bueno, no solamente estamos contribuyendo a una formalidad que no va a ningún sitio, que este Código puede tener consecuencias desagradables para nosotros, y que es de recibo que lo mismo que se nos pide implicación con él, la Empresa muestre también la suya por escrito. Que al igual que cualquiera de nosotros, puede ser responsable de incumplimiento, y que estamos apercibidos de sanción y posible despido con nombres y apellidos, que se pongan también responsabilidades al concepto Empresa, y que amparándose en la colectividad del significado del nombre, no se permita una política de manga ancha y del todo vale.

  • Salud y seguridad

actuamos como un empresario responsable que busca proteger la vida y la salud de cada persona que trabaja para Ericsson.

La salud de los trabajadores y la seguridad en el lugar de trabajo deberá constituir en todo momento una preocupación prioritaria. Esto se aplica a todos los aspectos de las condiciones de trabajo.

Ya sabemos de las sobrecarga a la que se somete a los trabajadores. Cada día hay más gente que sufre de “estrés laboral, (Estado de cansancio mental provocado por la exigencia de un rendimiento muy superior al normal; suele provocar diversos trastornos físicos y mentales.). Se necesita atajar el problema de raíz y no aplicar meras medidas cosméticas, que parecen querer derivar la responsabilidad al trabajador, por no estar suficientemente preparado para soportar estás situaciones.

Desde STC hemos tenido incluso que denunciar a la Empresa ante Inspección de Trabajo, porque ni siquiera estaban facilitando la gente de baja por esta causa.

 

  • Código de Conducta

Todos los empleados deben ser libres para crear o entrar a formar parte, o no, de las asociaciones de trabajadores de su propia elección, y deben tener el derecho de negociar de forma colectiva.

 Desde STC llevamos años reclamando un Convenio Colectivo particular y negociado para el Grupo Ericsson, más adecuado a nuestra realidad que el Convenio del Metal de la Comunidad de Madrid, que es el que se aplica mayoritariamente dentro del grupo.

Queremos aprovechar esta ocasión que nos ofrece el Código de Ética Empresarial para reclamar ese derecho que en él se nos ofrece. Estamos convencidos, que el resto de fuerzas sindicales estarán completamente de acuerdo, y que si todos queremos, no deberíamos negarnos dicha oportunidad, lo significar una gran mejora para todo el colectivo de trabajadores en lo que supondría una relación laboral con la Empresa mucho más realista, saneada, y eficiente que lo que actualmente tenemos.

Ningún individuo debería ser discriminado por su raza, color, sexo, orientación sexual, estado civil, embarazo, estado parental, religión, opinión política, nacionalidad, origen étnico, origen social, condición social, condición indígena, discapacidad, edad o pertenencia a un sindicato, o por cualquier otra característica

Y sin embargo, cuando uno llega a cierta a edad, alrededor de 45, empieza a respirar cierto tufo de que ya se es incómodo para la Empresa, de que ya no interesas, que en los ERE´s se castiga el envejecimiento, que al final todo se reduce a una cuestión de dinero. Que pasas a tener un perfil no deseable, que o te sometes a la política de miedo, o la Empresa buscará un trabajador más joven, más barato y con una menor consolidación de los derechos laborales que los que tú actualmente disfrutas.

Todos los individuos deberían conocer los términos y condiciones básicos de su empleo, y aquellos que tengan la misma experiencia, rendimiento y cualificación disfrutarán de igualdad de remuneración cuando desempeñen los mismos trabajos y en condiciones de trabajo similares.

Nos encontramos con que la Empresa tiene un sistema de remuneración totalmente opaco, discriminatorio. Hace años que se desconocen las tablas salariales donde se distribuía a los empleados por rangos.

No existe un listado de criterios objetivos que pueda servir de referente a la hora de evaluar nuestro desempeño profesional. Se impone una política de calificación por cupos, donde se distribuye a los empleados por su desempeño en malos, regulares y buenos, por decreto, con independencia de los méritos conseguidos ya que estos no pueden ser evaluados, y en muchos caso dependiendo simplemente de tu relación personal con tu “manager” inmediato, o tu grado de sumisión.

 

  • Tratar con conflictos de intereses

Segundo empleo – No puede tener otro empleo fuera de Ericsson, con o sin contraprestación, que afecte o pueda afectar a su rendimiento laboral en Ericsson o que genere o pueda generar un conflicto de intereses.

No pensamos en STC que el pluriempleo ayude a solucionar los problemas de empleabilidad que estamos sufriendo en España. Pero si Ericsson no quiere que sus empleados tengan otra actividad económica, tendrá que acordarlo con los trabajadores y ofrecer una contraprestación como ocurre en otros sectores, ya que la legislación española no lo prohíbe.

Ericsson trata de obtener un trato de favor de manera gratuita, cuando además es una Empresa donde la constante presentación de ERE´s en los últimos años ha creado un clima de inestabilidad laboral. No puede por tanto obligar a que la gente renuncie a segundas posibilidades de salida laboral, convirtiéndose en juez y jurado a la hora de determinar unas posibles causas de falta de rendimiento laboral cuando ni siquiera es capaz de presentar un listado de criterios lógicos para evaluar el desempeño de sus trabajadores, y encima bajo la amenaza de la sanción e incluso el despido.

Actividades políticas – Ericsson no realizará contribuciones o pagos ni respaldará de ninguna otra forma, directa ni indirectamente, a ningún partido político ni a comités o a políticos individuales.

Faltaría más, pero además por transparencia e higiene democrática, en STC pensamos que habría que extender esta cláusula a sindicatos y representantes sindicales, trabajen o no para el Grupo Ericsson.